Equilibrio Entre las Polaridades Masculina y Femenina. Hermano K. Bodas Celestiales. 18-05-2012. Con Audio. ¡Compartir!!!
Canalizado por: Jean Luc Ayoun
Transcripción: Véronique Loriot
Traducción: Amparo Iribas
Audio:
HERMANO K
18 mayo 2012
Yo soy Hermano K. Hermanos y Hermanas en humanidad, que la Gracia se establezca entre nosotros. Vengo a vosotros, hoy, para hablaros del equilibrio entre las polaridades masculina y femenina. Permitiendo, quizá, de haceros comprender y asimilar lo que se juega, durante estos días, concerniente al nuevo equilibrio entre dos aspectos, vividos sobre esta Tierra como complementarios y opuestos, pero que, más allá de esta Tierra y más allá de esta Dimensión, convergen los dos a establecer la Unidad misma.
En este mundo de acción/reacción predomina el principio mismo de la falsificación, el principio de alternancia de la acción/reacción, del karma. Todo lo que les es dado a ver, a percibir, a sentir y a vivir, oscila, en permanencia, entre lo que podría denominarse el bien y el mal, y que está representado, de manera muy justa, por ese símbolo extremadamente antiguo llamado el yin/yang. Donde (como lo sabéis) hay dos colores, el blanco y el negro, y en el blanco, existe un poco de negro, y en el negro, existe un poco de blanco, engendrando cada uno al otro. Se trata de un equilibrio dinámico. El día sucediendo a la noche, la noche sucediendo al día. Y es lo mismo para las estaciones (ndt: del año). Es lo mismo para todo lo que os es dado a observar y a vivir sobre esta Tierra. Este equilibrio dinámico se traduce también por la ausencia de Fusión, y la ausencia de posibilidad de resolución de esta complementariedad y de esta oposición.
En los Mundos más allá de la Tierra y más allá de esta Dimensión, las polaridades no presentan esta alternancia, ni esta noción de oposición ni de complementariedad. El equilibrio de las polaridades (masculina y femenina, tal como vosotros las nombráis) es un equilibrio que yo calificaría de inmóvil, porque no induce al movimiento continuo de búsqueda del uno o de la otra. Todo lo que existe, en la vida sobre este mundo, traduce ese principio de alternancia, que vosotros encontraréis desde el estado fisiológico, celular, pasando por los ritmos mismos de la Tierra, donde todo no es más que alternancia, donde todo se expresa sólo a través de un equilibrio precario, que necesita un movimiento, que necesita mismo esta alternancia. El principio de complementariedad puede ser vivido, efectivamente, sobre esta Tierra, como una noción de equilibrio, como una cierta forma de satisfacción. Lo que se puede expresar (y vosotros lo sabéis muy bien) en la noción de pareja, en la noción misma, ligada a la procreación. Este equilibrio aparente, entre las polaridades masculina y femenina, se traduce, muy a menudo, por una alternancia también, a nivel del cuerpo físico como de los cuerpos sutiles: por esta noción de fluctuación y de movimiento. También, por ese sentimiento particular que ustedes llaman: amar, o no amar. Y todos nosotros lo sabemos, porque somos marcados, en este mundo (donde puse mis pies, como vosotros), por la noción de pérdida, por la noción de carencia, que cualesquiera sean las circunstancias de lo vivido y de nuestro enfoque, va a seguirnos, de alguna manera, durante todo nuestro pasaje entre el nacimiento y la muerte.
Este principio de polaridad induce, pues, de alguna manera, aún en su noción armoniosa, a ese principio de carencia. Es totalmente diferente, por supuesto, en los Mundos Unificados porque las polaridades están Fusionadas, aún si ellas se expresan: por ejemplo, un Arcángel manifiesta una polaridad llamada de naturaleza masculina, aún en su Andrógino. En el conjunto de elementos que os han sido dados, durante estos años, permitiendo realizar el Sí, en lo que concierne a la activación de lo que es llamado los Nuevos Cuerpos (o las Nuevas Frecuencias de Vida), hay uno de los Cuerpos, llamado Andrógino Primordial, que está en resonancia directa con el Punto AL y la Estrella AL (ndr: se trata del 12avo. Cuerpo). Por supuesto, existe, en los principios llamados evolución, sobre este mundo, una posibilidad de alcanzar un estado particular (llamado Samadhi o Conciencia Turiya), donde no existe este antagonismo, esta complementariedad o esta oposición, donde parece existir un mayor equilibrio dando un sentimiento de permanencia, llamado Samadhi o Conciencia Turiya. Esto representa, en cierta forma, el acceso a la Unidad, trascendiendo y superando la Dualidad, inexorable, de este mundo.
Existen, pues, ciertos seres, cada vez más numerosos (y vosotros sois, cada vez más numerosos), capaces y aptos para reproducir este estado, donde parece existir un equilibrio, más allá del antagonismo, de la oposición, o de toda complementariedad. Sin embargo, aún realizando lo que ha sido llamado Sí, persistirá siempre (por el hecho mismo de la presencia de este cuerpo y de esta conciencia, sobre este mundo) la existencia de una carencia, aún si no os aparece en absoluto en el estado Turiya. Este principio de carencia representa, exactamente lo que ha sido separado y dividido, en esta vida, aquí, sobre esta Tierra, que es ese principio de Fusión de las polaridades masculina y femenina. La activación del 12avo. Cuerpo realiza, en cierta medida, la Fusión de los hemisferios cerebrales, la reunión (si se puede decir) de la intuición y de la razón permitiendo descubrir las virtudes profundamente femeninas: el sentido de acogida, el sentido de la receptividad, el sentido de la creación o de la procreación, el sentido mismo de una energía vuelta (si puede decirse) hacia el Interior, hacia lo que yo denominaría esta recepción. Porque, obviamente, la polaridad masculina, llamada sociedad patriarcal, es la que habéis percibido y conocido a través de la historia de la Tierra, desde tiempos inmemoriales. Donde hubo un principio de dominación, yo diría asimismo un principio de depredación, ligado justamente a ese desequilibrio, aparente, entre lo masculino y lo femenino.
La noción de Unidad quedó, de alguna manera (y vosotros lo sabéis) en un ideal. Ciertas informaciones y ciertas enseñanzas os fueron dadas, en su tiempo, por los pueblos Intra-terrestres, concernientes a la Unificación de la Conciencia (ndr: ver la rúbrica “Humanidad en Devenir”). Sin embargo, y vosotros lo sabéis, es, a veces, extremadamente difícil de mantener una armonía, dentro de lo que es complementario y opuesto, en ese yin y yang, en ese bien y en ese mal. El principio del yin/yang os dice asimismo que en todo bien existe un mal y en todo mal existe un bien. O, si preferís ser más neutros: en todo blanco existe un negro y en todo negro existe un blanco. Y uno engendra al otro y el otro engendra al uno, en permanencia. De esta situación de equilibrio precaria se derivan todas las desgracias de la conciencia humana, encerrada y fragmentada dentro de una Ilusión, dentro de una corporeidad polarizada. Lo que os parece, sobre este mundo, como natural, no lo es en absoluto, fuera de la Ilusión. Este equilibrio, perseguido de manera muy activa, por todo ser humano sensato y amante, no es, en definitiva, más que el resultado de esa carencia inicial, de esa separación que ha venido a alterar, en cierto modo, esta Creación. Ese principio de carencia incita, en permanencia, a una acción y una reacción. Esto ha sido llamado karma, y os ha sido presentado, por diversas enseñanzas, como una cuestión inevitable, como una cuestión a superar, pero que no se podía superar más que adhiriendo a este principio mismo, a esta misma filosofía.
Desde el instante donde vosotros experimentáis el Sí, desde el instante, donde os mantenéis en el Sí (por intermedio del Samadhi, o por intermedio de la Conciencia Turiya), la noción de fragmentación y de separación os aparece como caduca. Pero no podéis negar que mientras exista un cuerpo polarizado (sexual, como vosotros diríais), existe necesariamente un principio de carencia, cualquiera sea la forma en que se exprese. Para un ser inserto en la realidad tridimensional, y que no tiene ningún proceso llamado espiritual, esa (ndt: la carencia) va a manifestarse en los principios de competición, como en el sentido de ganarse la vida, de obtener un diploma, de casarse, de tener hijos y de encontrar (en cierta manera) un lugar que necesita defender, adquirir y preservar.
Esto está inscripto, desde luego, en todos los estratos del ser, desde la esfera sexual, pasando por la muerte, hasta la esfera social. Así, todas las relaciones están basadas sobre esa carencia (aún si ella no aparece) porque existe, en permanencia, una conciencia dirigida hacia el exterior, hacia este mundo, un principio activo que hace realizar ciertos objetivos.
Desde luego, existe un sentimiento de satisfacción, en esta Dualidad, desde el instante en el que un elemento se encuentra en equilibrio, se dé eso a nivel social, a nivel profesional, o a nivel afectivo (a todos los niveles, podría decirse). Ese equilibrio, vosotros lo sabéis, es precario. Es precario porque se inscribe, de manera irremediable, en lo efímero. Se inscribe, de manera irremediable, entre la vida y la muerte, y no presenta (como ya lo dije) ninguna solución de continuidad más allá de la muerte. Este mismo principio de separación y de complementariedad crea la carencia. Crea la acción/reacción permanente. Crea, en permanencia, el karma. Crea, en permanencia, obligaciones y deberes, muy lejos de la Libertad, tal como pueda expresarse cuando la Conciencia misma no está más ligada a la conciencia de este cuerpo, a la conciencia de los cuerpos sutiles, pero pasa (en cierta manera) del otro lado. Una cierta cantidad de experiencias sin embargo pueden ser vividas. Yo os narré la mía, a través de la pérdida y la falta de un ser querido, lo que fue suficiente para transformar (en cierto modo), de manera irremediable, ese sentimiento de carencia, en mí ***(ndr: intervención de FRÈRE K del 17 de marzo del 2012). La búsqueda espiritual va a expresarse a través de lo que vosotros llamáis una búsqueda de Luz, una búsqueda de la Unidad, una búsqueda de Amor, en el sentido más elevado, el más trascendental, el más idealizado, y el más perfecto que podríais imaginar. Entonces, desde luego, ciertos seres (por la meditación, por la plegaria, por la adhesión a un cierto número de creencias) pudieron alcanzar estados de Uniones particulares, que esta Unión Mística concierna al CRISTO, concierna al Sol, o a todo otro elemento considerado y vivido (antes de ese elemento fundador y federativo, si puede decirse) como exterior a sí. Esta exterioridad que traduce, acá también, ese principio de exteriorización de la energía de la conciencia misma, aspirando a completar lo que parece incompleto.
La reunificación con vosotros mismos consiste por lo tanto en establecer una Unidad. A trascender y a superar el bien y el mal, el principio de carencia, a hacer desaparecer la noción de miedo (en resonancia directa con esa carencia), a fin de estableceros, de manera más estable, en las experiencias de Samadhi, en las experiencias de Realización, o también llamadas de Despertar. La llegada del Manto Azul de la Gracia, restableció, como se os dijo, desde hace más de un año, una unión: una unión para la Tierra, una unión para vuestra conciencia, en lo que vosotros sois, en este cuerpo que os lleva. Donde una alquimia reciente, en cierto modo, conduce a revelar el principio que está más allá de la Unidad, que no es ni siquiera un principio, sino que simplemente, representa (si se puede decir) la resolución última del antagonismo, de la oposición, de la complementariedad. Esto es el regreso de lo que se llamó la Polaridad Femenina de LA FUENTE. Entonces, cuales sean los nombres que podéis darles (hasta el presente: la Shakti, la Shekina, la Polaridad Femenina de LA FUENTE), ésta, como os fue explicado, ha sido Liberada, también, de las profundidades de la Tierra. Y restituyendo, de alguna manera, a todo lo que está presente sobre esta Tierra, su totalidad, su homogeneidad, y de ser posible, lo que es llamado y designado Absoluto. El Absoluto consiste en esos elementos, que os han sido nombrados, y progresivamente vividos (por algunos de ustedes): desde la Comunión, pasando por la Fusión, pasando por la Disolución, pasando por la Unión Mística o pasando por las Bodas Místicas con los Dobles, cualesquiera sean.
Se deduce, que (para la mirada del ego) puede aparecer como una búsqueda de un ideal que no será alcanzado, de hecho, la posibilidad, real y concreta, de alcanzar ese estado de Absoluto (que no es un estado, como se os ha dicho). Eso pasa por el Doble, no hay otra posibilidad. Como vosotros lo sabéis quizás, en la historia de la Tierra, el Sol ha sido separado de su Doble. Ese doble, llamado de diferentes maneras, y llevando diversas denominaciones, es lo que creó el principio de aislamiento, el principio de Dualidad. Ese Doble Solar vuelve a él, y no podrá más alejarse. De la misma manera, vuestro Doble vuelve a vosotros, y no podrá nunca más separarse. Lo que se vive arriba es como lo que se vive abajo, ahora, de manera Libre, de manera Libertadora y Liberatoria. Llevándoos a estableceros en una conciencia (como eso ha sido expresado en palabras) donde la Onda de Vida se vuelve lo que vosotros Sois, y donde la Onda de Vida, que vosotros manifestáis y Sois, puede (si el momento llegó, habiendo superado las dudas y los miedos, los condicionamientos presentes en la personalidad, y ese sentimiento de carencia) permitiros realizar la finalidad, lo que ha sido llamado Ascensión (que ésta concierna este cuerpo, o que concierna vuestra conciencia sin este cuerpo). El cuerpo de Êtreté, que estaba encerrado en el Sol, que ha sido Liberado, que, para algunos de vosotros, se ha re-sintetizado (a nivel del despliegue de la Luz, tal como os ha sido explicado el año precedente), conduce, durante este año, a haceros reencontrar ese Doble Místico. Que puede tomar, como vosotros lo sabéis, diferentes formas.
A través de esta Fusión, que realiza la Alquimia de vuestra Lemniscata Sagrada con la Lemniscata Sagrada de aquél que es ese Doble, la Lemniscata se vuelve entera y plena. La circulación de la Conciencia se hace, esta vez, en una Lemniscata que no es más vertical, sino horizontal, realizando el principio de la Alquimia de las Cruces (tales como ellas os fueron descriptas a nivel de vuestra cabeza y puertas, por las Estrellas). Esto se traduce por la reunificación de esos Puntos Vibratorios, al centro, es decir en el Punto ER de la cabeza, como al Centro del Ser, en el punto ER del pecho. Permitiéndoos aproximar y vivir esa Presencia, ese estado de Presencia llamado Infinita, que puede, si ustedes lo concientizan, desaparecer ella misma, y (en una noción que os es difícil de comprender, en tanto que no se ha vivido) de estableceros en el seno del Absoluto. Los dos, finalmente, se vuelven Uno. Este principio está inscripto desde el comienzo de separación de este mundo: lo que ha sido separado debe reunificarse, en todos los niveles. No es cuestión de reemplazar este mundo, donde una élite patriarcal dominó y controló al mundo, por una élite matriarcal. Sino, más bien de reunir esas dos polaridades (que estaban en equilibrio de desequilibrio) en un equilibrio total, permitiendo reintegrar el Andrógino Primordial.
Esto se realiza en vosotros. Y se realizará, de todas maneras, aún si esto no está en curso, en las últimas fases de la Ascensión de esta Tierra. Con respecto a esto, desde luego, puede crearse, sobre esta Tierra, para vosotros, como alrededor de vosotros, un cierto número de reajustes, que os van a restablecer hacia ese estado, más allá de todo estado, llamado Absoluto. Que esto se realice a través de lo que habéis llamado un Doble Monádico, lo que ha sido nombrado la Fusión con el CRISTO o con un Ser de Luz, cualquiera sea, que ese Doble Monádico esté encarnado o no, no cambia nada, necesitáis Reunificaros. No solamente la reunificación de un ego trascendido por el Sí, no solamente un Sí que (en cierta manera) hace resplandecer algo en la Luz y el Amor, sino estableceros, en esta Dimensión, más allá de la noción misma de complementariedad. Esto se produce, en vosotros, a través de la aparición del Doble, a través de la aparición de lo que se llaman las Alas Etéricas (a nivel de Punto KI-RIS-TI), a través de la Fusión que se realiza, tal como ha sido descripto por UN AMIGO, a nivel de vuestro Corazón, Fusión entre una corriente ascendente y una corriente descendente ***(ndr: ver la intervención de UN AMIGO del 7 mayo 2012). El encuentro de esas dos corrientes y de esas dos polaridades, os va a hacer descubrir, y establecer, lo que siempre estuvo ahí. Pero, porque la conciencia había sido fragmentada, no podía apareceros y no podía, tampoco, manifestarse y concretizarse en el seno de este mundo.
El Manto Azul de la Gracia recubrió, de sus Alas, la Tierra, vuestro complejo físico y sutil sobre este mundo, los Puntos de penetración (yo os hablé de ellos largamente, el año precedente), concerniente al Eje ATRACCIÓN/VISIÓN. Lo que se realiza, hoy, a través de ese Doble, crea un equilibrio de las polaridades masculina y femenina, que se instalan (por Fusión de uno en la otra, y de la otra en uno, de la misma forma) en esas dos polaridades que habían sido separadas. Estáis llamados a volveros, como os había sido anunciado, los KI-RIS-TI, es decir los Hijos Ardientes del Sol, los que no conocerán más la sed, los que se saciarán en la Fuente de Agua Viva. Quien, jamás, permitirá que cualquier sed aparezca o reaparezca. Esto señala el fin del encierro, esto señala el fin de la Ilusión, el fin de la división, el fin de la preeminencia de una polaridad sobre otra (en un equilibrio dinámico), y la instalación en el seno del Centro, la instalación en el seno de esta Fusión del Andrógino Primordial.
Desde luego, existe todavía, aún para aquellos de ustedes que realizaron el Sí, un cierto número de apegos, representados por las dudas y los miedos, que todavía (si puedo expresarme así) sujetan vuestra capacidad y vuestra posibilidad de estableceros en el seno de esa Unidad Final, representando el principio de Fusión y Disolución de las polaridades, de los antagonismos y de las complementariedades. Esto es una realidad. Ella os da a vivir en el seno del Sí, ella os da a vivir, a través de lo que yo llamé la Alquimia de la Lemniscata Sagrada, la Alquimia de la Onda de Vida, fluyendo del uno a otro, y del otro al uno, realizando una Unidad nueva, mucho más allá de lo pudisteis vivir en tanto aquélla no se realizó. Comprended, también, como se os ha dicho, que no hay una búsqueda a llevar a cabo, porque como Absoluto, ese principio de equilibrio, estático y final, Último, viene a vosotros de manera espontánea. Desde el instante donde el conjunto de lo que os encerraba, en la ausencia de relación entre lo que se denomina el 1er. Chakra y el 4º. Chakra (o, si vosotros preferís, la esfera pelviana y la esfera cardíaca), desde el momento, donde las barreras (si se puede decir) que mantenían la separación, desaparecieron. Estas barreras han sido llamadas el miedo y la duda, porque no hay nada peor, en este mundo y sobre este mundo, que el miedo y la duda, que están registrados en nuestras células mismas, por el traumatismo inicial que representó la separación y división con ese Doble.
Esta visión que expreso con palabras, os hace pensar e imaginar que existe un Doble, es decir que existen dos entidades diferentes, para vosotros, sobre este mundo, que se reunificarían. Básicamente, esas dos conciencias, esas dos entidades, no son al principio más que una sola y misma entidad. Que ésta concierna el CRISTO, que ésta os concierna, en tanto que Hijos Ardientes del Sol, que ésta os concierna con otra entidad de Luz, cualquiera sea, es el mismo principio, es la misma descripción. El Absoluto, corresponde, en lo sucesivo, a esta capacidad de trascender el miedo y la duda, cualquiera sea, y en cierto modo, a hacer volar en mil pedazos el conjunto de límites, el conjunto de marcos, el conjunto de funciones de la encarnación, que es, básicamente, un principio de separación. Una vez más, a través de esto, no es cuestión de abandonar la materia, sino de espiritualizar la materia. La espiritualización de la materia sólo se puede realizar si el Doble está presente. Este es el principio mismo de la Ascensión, tal como debe vivirse por cada uno de vosotros, en el momento final del Encuentro, total e integral, con la Luz Vibral. El descenso de la conciencia, el descenso del Supramental, la subida de la Onda de Vida, preparan, en vosotros, este Encuentro Último. A fin de estableceros, si tal es vuestra Realidad, en el seno del Absoluto, o en el seno de la Presencia Infinita del Sí consumado.
Todo esto está en camino hacia vosotros. Sean cuales sean las manifestaciones de vuestro cuerpo, sean cuales sean las manifestaciones del desarrollo mismo de vuestra vida, si vosotros salís de la mirada de la personalidad, si vosotros salís de la mirada de la división, si vosotros salís de la mirada de la carencia, si vosotros salís de la mirada del traumatismo (sea cual sea), en ese momento, esto se revelará a vosotros de manera extremadamente simple, una vez más, sin esfuerzo y sin búsqueda. Porque nosotros ya no estamos (y vosotros ya no estáis) en los tiempos de alguna búsqueda. Porque no hay nada para buscar. Porque todo está aquí. Para eso, es necesario que vuestra mirada, vuestro punto de vista y vuestra conciencia, acepten este principio mismo, acepten este Encuentro, esta Unión. Todo esto, una vez más, aún si esto no parece que os concierna, o parece muy lejos de vuestras preocupaciones actuales, es, yo lo repito, un acontecimiento inexorable e inevitable. Sea cual sea el momento a vivirlo (o que haya sido vivido), representará, para vosotros, lo que yo llamaría una certeza total: no puede existir la mínima duda, el mínimo miedo, la mínima interrogación, la mínima sospecha, con respecto a ese acontecimiento, pues es, verdaderamente lo que yo llamaría un acontecimiento. Este acontecimiento no puede ser buscado. Desde luego, si se produce, posiblemente va a inducir, a nivel de lo que vosotros sois (en lo que resta de personalidad, de ego, o de corporeidad), una interrogación. Pero inclusive esta interrogación no podrá acabar con la certeza que es la vuestra. Porque esta certeza no se expresa a través del mental, no se expresa a través de las emociones, no se expresa a través de los afectos, no se expresa a través de la esfera denominada Éros, sino que se expresa, únicamente, a través de la Alquimia Vibratoria que realiza la Unificación de los Dobles. Y creando, en ese momento, por sí misma, por el principio de Disolución y de Fusión, el Absoluto. Recreándolo, revelándolo, y develándolo.
Sean cuales sean las circunstancias en que esto se produzca, sea cual sea el tiempo (o el momento) en que esto se produzca, para vosotros, lo reconoceréis, porque es un reconocimiento instantáneo, que no apela a ninguna oposición. Recordad que los únicos obstáculos sois vosotros mismos, a nivel de los miedos y las dudas. Esos miedos y esas dudas volarán en pedazos desde el instante donde la intensificación de la Onda de Vida, Liberada por la Tierra, lo permitirá. Sean cuales sean vuestras resistencias, sean cuales sean vuestras oposiciones, no podréis oponeros, no podréis resistiros a lo que es inevitable e inexorable. El equilibrio, así, de las polaridades masculina y femenina se volverá una evidencia total, porque el estado es Último. Y este Último no puede representar nada equivalente a lo que puede vivir la conciencia, tanto en el ego como el Sí más Infinito. Desde ese instante, vosotros entonces, habréis (si puede decirse) iniciado ese proceso que es llamado la Ascensión. No hay nada que pueda haceros dudar. No hay nada, una vez más, sea cual sea el estado de vuestro cuerpo, el estado de vuestros afectos, el estado de vuestros vínculos, cualesquiera sean, que puedan oponerse a esto. Esto representa lo que ha sido llamado el Juramento y la Promesa, de encontraros con lo que habíais sido separados. Sea quien sea que está al otro punto, de vuestro punto, no se trata, de hecho, más que de un vínculo de Libertad, que de una Liberación total, que se pone en marcha en la hora actual.
Mis palabras han sido muy breves. Yo sospecho que ellas os llevan a una cantidad de preguntas, y yo estoy acá, ahora, para responderlas, exclusivamente con respecto a lo que vengo de decir.
Pregunta: ¿Cuando se piensa haber encontrado su Doble encarnado, hay lugar para provocar un encuentro físico?
Mi Hermana, a ¿qué llamas tú encuentro físico? Este encuentro es un encuentro de Eternidad. Para algunos, se debe cumplir en todos los planos, para otros, no. Eso depende, desde luego, de numerosos factores. Esos factores tienen por nombre, simplemente, la duda y el miedo. Desde el instante, donde hay aceptación, es decir, desde el instante donde tú no pensarás más haber encontrado, sino donde tú tendrás esta certeza, que yo acabo de evocar, el conjunto del Cielo, el conjunto de la Tierra, contribuirá a establecer ese Absoluto. No puede existir el menor obstáculo.
Pregunta: ¿Cuando uno encuentra su Doble, no puede haber duda sobre el hecho de que es su Doble?
Es lo que expliqué: más allá de todo encuentro solar, posible y normal, en las Dimensiones Unificadas, en efecto, desde que vosotros sois Liberados del principio de aislamiento, desde que vosotros encontráis vuestra Eternidad, como lo sabéis, no hay más fragmentación, no hay más límite. Vosotros sois a la vez la Fuente, a la vez el Absoluto, a la vez un Arcángel, a la vez un Ser de Luz. Podéis fusionaros, en ese momento. Pero esa fusión es un Encuentro, más allá (a nivel de la calidad Vibratoria vivida por la Conciencia) del Éxtasis o del Samadhi más importante, posiblemente alcanzado por el ser humano en encarnación. El Encuentro del Doble existe más allá, sea quien sea ese Doble. Porque eso se traduce, de manera horizontal y vertical, por una unificación de la Lemniscata Sagrada. No es el pensamiento que va a crear la certeza, es la Vibración misma que conduce a la detención de la Vibración, es decir al Absoluto. Por tanto, no hay que hacer preguntas con respecto a esto. La evidencia es tal que tú no puedes negar lo que se produce, en ese momento. Esto no tiene nada que ver con cualquier sentimiento amoroso o un sentimiento espiritual o místico. Está más allá. ¿Cómo podría existir una duda, cualquiera sea? Desde el instante donde las dudas y los miedos, que están presentes en el seno de la personalidad, no existen más, como vosotros lo sabéis, la Onda de Vida se alza para volver a salir por la parte superior del cráneo y fusionarse con el Vajra, realizando lo que se llama, la Merkabah interdimensional personal. En ese momento, habiendo trascendido y superado los límites de la encarnación, la materia es espiritualizada, lo que fue descripto por UN AMIGO, como tener ese escalofrío y ese temblor del cuerpo. Desde ese instante y desde el instante donde se produce este Encuentro (que no tiene nada que ver con un encuentro corriente o mismo espiritual), no puede existir la menor duda, para uno como para el otro, donde esté. Muchas de las Estrellas os describieron su boda con el Cristo, su experiencia y lo vivido: su vida se volvió una unión mística, permanente y sagrada, con el Cristo. De la misma manera, que ese Doble sea un Ser de Luz presente en el Sol, o en otro lugar, un Arcángel, o toda figura. Recordad que no hay separación, por consiguiente, no puede existir el menor intento de una pregunta, sea la que sea. Sólo lo que queda de personalidad, aún habiendo superado las dudas y los miedos, puede haceros vacilar. El aspecto Vibratorio, una vez más, supera todo lo que puede ser comprendido, lo que puede ser vivido sobre esta Tierra. Porque existe, realmente, una alquimia entre esas 2 conciencias. La alquimia se realiza no solamente a nivel celular, sino, también, a nivel de los centros de energía, de los centros de Conciencia, de las Estrellas, de las Puertas, del conjunto de las estructuras, donde ellas estén, realizando una perfecta sincronicidad y una perfecta alquimia y simbiosis total.
Pregunta: ¿Cuál es la distinción entre el establecimiento en el Sí Infinito y el Absoluto?
El Sí Infinito es el estado llamado el Último Samadhi, aquél que os hace descubrir la Disolución misma de la Conciencia pero que, por tanto, no es la Disolución de la Conciencia, que como vosotros lo sabéis, es Absoluta. La no- Conciencia es Absoluta. El principio de alquimia, que yo vengo de describir, entre 2 Conciencias que se sentían separadas y que estaban efectivamente separadas (que eso sea con vuestro Doble llamado Êtreté, con vuestro Doble etérico reconstituido, o con el Doble Monádico o con el Cristo), es exactamente eso que se restablece. Desde el instante en el que se manifiesta el Sí, el Despertar o la Realización, la Liberación sigue. Pero ella no sigue en el sentido lógico. Ella sigue en el sentido de una Trascendencia que no tiene continuidad. Es, justamente, ese Doble que permite realizarla. El no os aparece necesariamente, donde sea que esté, desde el comienzo de la activación de la Onda de Vida, ni aún en la finalidad de la Onda de Vida. Porque como vosotros lo sabéis, hay, en ese nivel y en vosotros, en este cuerpo, una transmutación que se acaba, en lo que concierne, las dudas y los miedos, en lo que concierne a la reunificación de los 3 Hogares en el seno de lo que ha sido llamado el Caduceo de Hermes. Desde el instante donde las alas etéricas aparecen, estáis en el punto de revelar el Último. Es en ese momento que se realiza y se concretiza la Ascensión. Se trata bien de una espiritualización de la materia y no de una huída de la materia. La diferencia entre la Infinita Presencia y el Absoluto, es justamente, el momento, donde se vive, inconsciente o conscientemente, yo diría, este Encuentro con el Doble, que se traduce, en el seno de la Conciencia, por ese estremecimiento y ese temblor, que se produce, en el cuerpo, por la puesta en circulación del Caduceo de Hermes, traduciéndose, en el seno de esta Conciencia encarnada, por la activación del conjunto de Estrellas de la cabeza, reunificándose a nivel del punto ER. Dándoos a vivir, como mecanismo último de la Conciencia, el punto central de la cabeza, el conjunto de la Lemniscata Sagrada, el conjunto de Puertas, la subida de la Onda de Vida, el despertar de la Kundalini, en su totalidad.
Pregunta: Si no hay nada que hacer, como se repite regularmente, ¿qué explica la diferencia de lo vivido entre algunos humanos y otros?
De la misma manera que, durante las Bodas Celestes y durante su finalización, algunos seres tocaron y vivieron su cuerpo de Êtreté, otros, no. Del mismo modo, vosotros estáis en esta etapa de fin de los tiempos y no del fin del mundo, pero de transformaciones radicales de un mundo. Algunos de vosotros maduraron muy rápido. Del mismo rosal, las rosas no hacen eclosión al mismo tiempo. Todo depende de la calidad de la savia, todo depende de la calidad del brillo del sol que os llegó, que vosotros aceptasteis o no. En definitiva, todo el mundo, sobre esta Tierra, vivirá este Encuentro. Vosotros no tenéis que buscarlo, porque la búsqueda traduce, simplemente, un deseo, donde quiera sea situado. En tanto que eso permanezca en un deseo, aquél os está cerrado. El Encuentro viene a vosotros, el Absoluto no puede ser buscado. En tanto que vosotros lo convertís en un ideal (espiritual, sensual, complementario masculino-femenino), vosotros os equivocáis. Esto se llama el Regreso de Cristo. El Cristo os lo había dicho: “Yo y mi Padre somos Uno”.
Pregunta: ¿el Doble puede aproximarse a nosotros antes de tener su Encuentro, o no?
Mi Hermana, ¿en qué sentido entiendes tú “aproximar”? El puede manifestarse en sueños, pero la proximidad es ante todo Vibratoria, aún antes de toda identificación.
Pregunta: ¿Se puede experimentar la presencia del Doble, antes de que se realice el Encuentro?
Sí. O en la espalda, llegando a vuestra espalda. O llegando a través del canal marial, o sea a la izquierda de vuestro cuerpo. Como una presencia. Y es una presencia. Sea cual sea la localización de ese Doble, hay una presencia, a vuestro costado, que penetrará en vosotros, por la izquierda, por la parte superior del cráneo o por detrás, a nivel de las alas etéricas.
Pregunta: En la frase “Yo y mi Padre somos Uno”, a qué hace referencia la palabra Padre?
ABBA. La fuente. El Cristo es el modelo de la Fuente. El se fusionó con su Eternidad que era, para él, la Fuente. Porque el Cristo (el personaje, llamado histórico, era Jesús), incorporó su Doble. En ese momento, pudo cumplir su ministerio, durante 3 años. No antes. “Yo y mi Padre somos Uno” o “yo y mi Doble somos Uno”, traduce el principio de un Absoluto. Una vez más, el término principio no es el más ajustado, pero no existe la palabra. El más grande de los escollos sería, quizá, de buscar ese Doble. Porque desde el momento, como ya lo dije, donde hay una búsqueda, hay un deseo, cualquiera sea la expresión de ese deseo. El Doble viene a vosotros desde el instante en el que realizasteis, yo os lo recuerdo, vuestra Unidad, sobre este mundo. Fluye así la Unidad en el cosmos, en todas las Dimensiones. Lo que podéis mirar, con vuestra mirada de la razón, de la personalidad o del Sí, puede os parecer particular, en la medida en que tenéis la tendencia a considerar que vosotros estáis enteros, vosotros solos.
No. Los místicos de todos los tiempos os hablaron (aún sin poner esa palabra que ellos no tenían la posibilidad de poner) de este Encuentro. Sea nuestro Comendador (ndr: O.M.AÏVANHOV) con el Sol, sean los otros Ancianos, esto ha sido mucho más expresivo para lo que nosotros llamamos las Estrellas y muchas otras mujeres. Porque para ellas, era mucho más fácil acoger la parte faltante, que estaba, si se puede decir, más activa sobre este mundo, que yo nombré el patriarcado. La energía masculina era, en efecto, mucho más abundante que la energía femenina. Esto es lo que explica, de manera constante, sean cuales sean las religiones, sean cuales sean las culturas, que la entidad femenina manifestó siempre, de manera más intensa, esta Fusión y este Encuentro. Tanto más que existía, si puedo expresarme así, un modelo llamado Cristo.
Pregunta: Muchos de los disertantes nos dijeron que todo estaba en nosotros, los Arcángeles, las Estrellas. Por consiguiente ¿nuestro Doble estaría igualmente en nosotros?
A condición de reconocerlo. Es el principio mismo de la separación, así como lo expliqué. Una cosa es saber que los Arcángeles están en vosotros. Otra cosa es vivirlo. Es lo mismo para el Doble. ¿El Cristo os dijo que era el Padre? Aquí, en este cuerpo limitado, hay Fusión, hay Unidad, hay Absoluto. Por tanto, ¿manifiestas tú los atributos de un Arcángel, aquí en este mundo? Está inscripto en tu realidad, en el mismo ADN.
Pregunta: Podría usted precisar la diferencia entre deslocalización y Comunión?
La comunión se vive en vuestro cuerpo. La deslocalización os llama a expresar vuestra Conciencia en otro lugar fuera de este cuerpo: en el cuerpo de Êtreté, en un Arcángel, o aún en el Doble. La deslocalización puede también corresponder a un proceso particular, realizado a través de diversas informaciones que nosotros dimos, los unos y los otros, en estos años. En particular, el proceso de walk-in consciente bidireccional donde hay un cambio de cuerpo y de alma. La Comunión se vive en una conciencia todavía fragmentada. La deslocalización, como la multi-localización, que sobreviene más tarde, realiza el fin de la fragmentación, permitiendo que os deis cuenta de lo que decía, todavía ayer, María. Cuando vosotros estáis más allá de la separación, vuestra Conciencia no es afectada por cualquier multi-localización, lo que os es imposible, todavía, de este lado, donde vosotros estáis. Desde el instante donde el Absoluto está aquí, vosotros sois, a la vez, este cuerpo, a la vez, el otro cuerpo, pero al mismo tiempo, el cuerpo de Êtreté. Y vuestra Conciencia está presente, de la misma manera, en este cuerpo de carne, como en el cuerpo de Êtreté, como en el cuerpo del Doble. Correspondiendo, una vez más, a eso que había dicho el Cristo: “Yo y mi Padre somos Uno”. Lo que surge es una revolución total, sin solución de continuidad. Y sin embargo, es exactamente lo que vosotros Sois. Muchos de entre nosotros os dijeron que vosotros no erais ni este cuerpo, ni este mundo, ni esta realidad: el conjunto de filtros puestos por la separación y el Eje Atracción/Visión os impiden ver claramente esto y de vivirlo. Vosotros lo vivís, desde el instante en el que hay el Encuentro. Nosotros no podíamos evocar esto en tanto que no estaba instalada, para muchos de entre ustedes, la Onda de Vida. Porque recordad que es, es un primer tiempo, el Encuentro del Supramental y de la Onda de Vida que os da a vivir la apertura a esta posibilidad. No servía de nada concebir, hablar, expresar lo que sea concerniente a esto, en tanto que no estaba activa, en vosotros, la posibilidad de vivirlo.
Pregunta: ¿la posibilidad de vivirlo está activa en toda la humanidad, en todo ser humano?
No. Eso no estará activo, para la gran mayoría de los seres humanos, que hasta el último momento. Porque las fuerzas de resistencia son todavía muy fuertes, salvo para aquéllos de entre vosotros que trascendieron sus últimos miedos y sus últimas dudas. Recordad: el equilibrio Yin-Yang de este mundo es vivido como una complementariedad y un antagonismo. Lo que es estrictamente lo opuesto, en el Absoluto. Hay una sincronicidad produciéndose en este cuerpo y lo que yo dije, que es la reunificación del Sol con su Doble.
Pregunta: Puede haber varios Dobles?
No. Puede existir lo que vosotros llamáis boda mística con múltiples entidades, como vosotros la realizáis cuando salís en Êtreté, con un Arcángel o con toda Conciencia liberada. Existe un Doble llamado etérico, que es, de hecho, simplemente, vuestro etérico, reconstituido en su Dimensión original, que se superpone a vuestro propio cuerpo etérico, viniendo a modificar, como ha sido expresado, vuestra propia vitalidad, vuestra propia fisiología. Existe, en fin, un solo y único Doble dándoos a compartir, a unificar y a alquimizar, en una simbiosis, la Lemniscata Sagrada, la Onda de Vida y el conjunto de estructuras. No existe más que uno. Los diferentes Dobles que han sido establecidos son: El Doble etérico, eventualmente un Doble correspondiente a un cuerpo sutil, pero el más importante, desde luego, es el Doble llamado Cósmico. Estos son los únicos Dobles os han sido establecidos. El Doble etérico es vosotros mismos. Nosotros podríamos decir, para aquél que se multi-localiza, que el cuerpo de Êtreté es su Doble. Pero no existe más que un solo Doble y uno solo. El único que os permite realizar la alquimia y la simbiosis de la Onda de Vida y del conjunto de chakras y del conjunto del Caduceo de Hermes.
Pregunta: ¿un encuentro con María, hace algunos años, puede ser una experiencia mística?
De cualquier manera, es una experiencia mística. Ahora, eso era imposible, hace algunos años. Por tanto, eso no puede ser más que un encuentro místico. En lo sucesivo, María puede manifestarse como vuestro Doble. Pero, una vez más, esto no es una experiencia, porque se trata de la Fusión definitiva de los principios de la Onda de Vida, de los principios celulares, de los chakras, tanto como del Caduceo de Hermes. Vosotros no os podéis equivocar con respecto a esto. Sólo el mental busca y se equivoca.
Pregunta: Es exacto que se debe proceder con el Doble como con el Absoluto, es decir no buscar nada porque toda búsqueda no haría más que alimentar el mental?
Es exactamente lo que yo dije, en el enunciado mismo de mis palabras. En tanto vosotros buscáis lo que sea, estáis en un error. El Doble es una evidencia que se impone y que no puede, en ningún caso, expresar un deseo o una búsqueda. Nosotros somos conscientes, los unos y los otros, de esta razón que ha hecho que no habláramos de esto mucho antes, porque las proyecciones son inherentes a la naturaleza humana, de buscar un complemento. Pero vosotros no podéis buscar un complemento, él se revela cuando están reunidas las condiciones. No es, en ningún caso, un acto mental. No es, en ningún caso, una complementariedad, en el sentido humano. Si nosotros os lo revelamos ahora, es porque el Manto Azul de la Gracia ha obrado, porque la Onda de Vida (para aquéllos de entre vosotros para quienes nació, para quienes ascendió) hace posible este proceso. Pero una vez más, no hay que buscar explicación, razón, ni justificación porque, cuando aquello se produce, nada puede oponerse. Existen situaciones personales donde el Encuentro del Doble no está permitido, a causa de situaciones personales que ocasionarían sufrimientos y elementos de resistencia. Que ese Doble este encarnado, o no, no cambia nada. En la historia de este planeta (y en Occidente, en particular), cuando un alma, un cuerpo, encontraba el Cristo, ella entraba en las Ordenes. ¿Qué haríais vosotros, hoy, si el conjunto de vuestra vida no ha sido depurada y preparada para eso? Es en ese sentido que la información es útil, pero no debe desembocar, en vosotros, ninguna búsqueda, ni ningún deseo. Dejad las cosas venir a vosotros. Ellas vendrán en el momento más adecuado, tanto para vosotros, como para el conjunto de las relaciones, cuáles sean, alrededor de vosotros.
No tenemos más preguntas. Os agradecemos.
Hermanos y Hermanas en Humanidad, vivamos, juntos, un momento de Comunión y de gracia, en el Manto Azul de la Gracia.
... Comparto del Don de la Gracia...
Hermanos y Hermanas en Humanidad, hasta pronto.