Oriol -181013-
Conocer las esferas del Karma, para llegar al Dharma:
-Cuando la liberación, se vuelve agradecimiento....-
Cuantos de nosotros, nos preguntamos constantemente, sobre el conocer las esferas del Karma, esas que nos influyen directamente en la plena liberación de nuestro propio ser, en su mayor expresión. Una vez integramos la tendencia del Karma, vienen hacia nosotros las energías de una extensión de luz superior, esas que nos brinda el Dharma. Este puede ser extendido de diversas formas, adoptando múltiples estados dentro de los cuales, nuestras influencias pueden actuar desde extensas colaboraciones, como también en karmas individuales. Las vertientes de lo sagrado, mantienen la frecuencia del Karma, desde una acción-reacción mientras que actúan en el Dharma, como una plena integración de la reacción, para su extensión. El camino de aprendizaje demarca una influencia directa, en la extensión de un tiempo sumido en las referentes, desde las cuales son sumidos nuestros ciclos de aprendizaje, como mentes planetarias. La múltiple visión, que acontece ante nosotros, actúa a la hora de fortalecer a base de un compromiso mas eterno, la siembra de las semillas de un principio el cual lo elegimos nosotros, a base de ir andando en nuestras vidas. De esta forma, el encontrar respuestas a nuestras vidas, influye directamente en la vida de los demás, actuando en una variante de espacio, que delimitamos nosotros mismos. Todo lo que acontece a nuestro alrededor, es una manifestación de nuestros propios pensamientos, extendidos a nivel mental para su propia representación.
El Karma Inferior, y el Karma Superior
De esta forma, nosotros mismos nos ceñimos a conocer nuestro propio Destino, el cual se va labrando a medida que adoptamos las circunstancias necesarias, que se dan al caso para vivir-las. La referencia de la textura del Destino, acontece en múltiples de las variadas posibilidades, que influyen en nuestros propios registros de realidad. Dentro de esta, nos hemos de ceñir e contemplar con total claridad, que esta varia de forma notable, como varían nuestras frecuencias mentales, dentro de este espacio de ascensión planetaria. No existe la posibilidad de re-ajustar el tiempo donde residimos, aun así, si que es posible actuar de acuerdo a una actitud superior, desde la cual la reacción de nuestras experiencias no condicionaran un Karma inferior, en nuestras travesías de aprendizaje. Elevar nuestras experiencias, a una variante de tiempo superior, acontece en la formación periférica de todo lo que es representado a nuestro alrededor, al actuar de acuerdo a la perfecta decisión de nuestras propias experiencias. Así mismo, actuamos de acuerdo a múltiples formas o energías en cuestión, ya que se pueden ver representadas todas las energías que nos rodean, dando lugar a que nuestros Karmas, no sean siempre de clase inferior. La posibilidad de actuar de acuerdo, a una actitud sumida desde la aceptación contempla el perdón como una esfera del real y divino conocimiento, el cual integra directamente la influencia en nuestras travesías, del Karma superior. Energías como el perdón y la aceptación influyen directamente en nuestras existencias, aconteciendo ante nosotros a la hora de representar, múltiples estados en los que ser conscientes en su plenitud, de los estados Karmicos que estamos atravesando. De esta forma, asumimos que no actúa el Karma como una manifestación de energías para nuestro retraso, por el contrario el Karma es la puerta de entrada para poder gozar del Dharma.
A medida que avanzamos por la experiencia como humanos, vamos viendo como a nuestro alrededor, los paisajes adoptan otras formas de expresión, re-ajustado nuestras emociones y sentimientos, e infundiendo así una textura directa, la cual acontece ante nosotros, como la trans-versacion del velo de 3-d. La travesía de aprendizaje que llevamos a cabo como humanos, actúa de forma directa en nuestras psiques, acomodando nuestras emociones y sentimientos, en una graduación mas elevada para poder emitir luz, en todos los sentidos. Todo lo que es integrado, (reconocido e experimentado a través de la forma como humanos), adopta una variante dentro del tiempo, con una determinación sumida en la periferia del Dharma. Ya hemos cumplido con múltiples de nuestros Karmas, aun así, no eramos lo suficientemente conscientes de la posición adecuada, para representar nuestra integridad a través de ellos. Muchos de nosotros, necesitábamos pasar por lo acontecido hasta el día de hoy, para despertar en el presente, a las energías de la nueva era. Como podéis ver, sentir, palpar y escuchar, todo acontece a través nuestro en su divino orden, y somos nosotros mismos, a medida que adoptamos una consciencia superior, que nos unimos a la danza de la ascensión planetaria. Después de la lluvia, siempre viene la calma, así mismo, se representan los estados a través de los cuales son manifestadas, nuestras experiencias de aprendizaje. No caigamos en el error de que todo lo que acontece a nuestro alrededor, es una desgracia, por el contrario asumamos nuestros papeles, y demos parte de comprender, ¿porque estamos aquí?, y ¿que hemos de transmutar?, para reformular, nuestros Karmas en Dharmas.
Dentro de este prisma de realidad, el cual integra y no sufre dolor por lo que vive, son emitidas las esferas del alto conocimiento, dentro de las cuales se re-imprimen en nuestro ser, las variables constantes del Dharma, que nos devuelve a ser en realidad. Muchas mentes, creen que el Karma les aleja de ser quienes son en realidad, mientras que este es una extensión inferior, de nuestro propio camino de aprendizaje. De esta forma, cuando la liberación se vuelve agradecimiento, son representados ante nosotros, los influjos de nuestras verdaderas familias de luz, las cuales insisten constantemente en las re-calibraciones de nuestra propia identidad estelar. Mientras atravesamos un proceso Karmico de aprendizaje, a través de una liberación Dharmica de nuestra propia extensión, la cual no es realmente abierta de veras, hasta la manifestación de nuestro propio Yo en su plena integridad planetaria. Mis queridos hermanos y hermanas en la Tierra, es tiempo de conocer las esferas del Karma las cuales tienen que ser liberadas, para que adoptemos de veras nuestra actitud soberana, desde la extensión del Dharma, para poder vivir en la liberación constante, del valor del nuevo tiempo. La inversión de un espacio creado por el dolor humano, a construido un estado de ser, en el cual las cumbres de un tiempo de ascensión, se hacen visibles, aun que eternas a la hora de esperar ser vividas, desde un nuevo tiempo. Vivir en plenitud es un don del espíritu que tiene que ser llevado, a cabo desde la verdadera integración del Yo en la Tierra.
De esta forma, integramos que la visión de un nuevo tiempo no es una realidad futura, sino que es posible en el presente, a medida que nuestras propias energías son integradas, y re-ajustadas a través de las ondas de tiempo, que son vividas en el presente. No existe nada nuevo, mientras sigamos inversos en una reconstrucción constante del conocimiento ancestral, el cual influye directamente en la toma real de liberación, de nuestros propios Karmas. Los espacios vacíos, son faltas energéticas de un tiempo de adaptación a nuestros verdaderos legados de luz, estos engloban la manifestación del mayor registro del verdadero tiempo, el cual se abre paso ante nosotros en su mayor extensión. Estos engloban las posibilidades de un real conocimiento, mas allá de una visión de tiempo suspendida en sus posibles expresiones del mas alto nivel. De esta forma, son contempladas múltiples de las posibilidades, aun que alejados de nuestros propios egos, (los cuales nos hacen creer, quien somos en realidad) y así re-formular nuestras posibles extensiones, adoptando un alto porcentaje de luz solar.
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