Extracto del libro :
Esta conversación entre la autora Aurelia y Sananda .
Por: Aurelia Louise Jones
Mount Shasta Light Publishings
Abril 2006
Traducción: Gloria Mülebach
Audio:
Sananda: Comprende que hay una razón por la cual no te caen bien esos individuos y has tenido algunos desagradables encuentros con ellos. Tal vez hubo una cierta abrasividad y pudieran haberte caído mal. O pudieran haber sido irritantes en tu vida, como cuando alguien trata de aprovecharse de ti, etc. Ahora bien, toma esta irritación e identifícala. Pregúntate qué es lo que te irrita, molesta, o enoja verdaderamente de esta persona. Pregúntate cuáles emociones te hacen surgir dentro de ti. ¿Cómo te sientes en presencia de esa persona? Te será evidente que esta persona te hace sentir de una cierta manera que no te gusta. Bueno, por supuesto ella no te puede hacer sentir de ninguna manera negativa porque ella no tiene ese poder para hacerlo. Sólo tú tienes ese poder. Si tú te sientes irritada es porque esas emociones ya están presentes en ti.
Esas personas en tu lista son meramente tu 'disparador' y tu 'espejo' para que reconozcas lo que todavía tienes que sanar dentro de ti a fin de avanzar a una frecuencia vibracional más elevada. Realmente no tiene nada que ver con la otra persona en absoluto. Ahora, escava profundo y mira realmente dentro de ti, y analiza cómo te estás sintiendo y cómo otra gente y otros espejos en tu vida han disparado la misma cosa. Quizá no exactamente de la misma manera, pero de una manera similar, y cuántas veces ha sucedido esto a través de tu vida.
Aurelia - Cientos de veces tal vez.
Sananda - Verdaderamente. Luego pregúntate qué has juzgado u odiado en ti misma para haber creado este espejo. Tú sabes muy bien que todo se trata acerca de ti, acerca de cómo te sientes al más profundo de los niveles. Nunca se trata de la otra persona. Cuando vas realmente profundo dentro de ti, llegarás a entender que esto meramente representa un malentendido dentro de ti misma, un juicio que has sostenido acerca de ti o un enojo que has sentido contigo misma. Se trata de una falsa creencia que has creado acerca de ti. Cuando sanas una desavenencia que tienes con otra persona, no es la otra persona a quien estás sanando; eres tú. La otra persona pudiera o no haber salido beneficiada de ello, pero eso no es tu problema. El personaje principal eres tú, creando tu propia sanación.
Estas experiencias son meramente catalizadores que tú misma creaste porque querías resolver las falsas creencias que sostienes acerca de ti misma, aquéllas profundamente enterradas en la mente subconsciente o inconsciente. Por eso son creadas, para disparar un nuevo nivel de sanación. Dios no te está enviando gente que te moleste para su propio entretenimiento. Tú misma, mediante tu propia intención divina de realizar tu iluminación, atraes magnéticamente a aquellos individuos que van a provocar tus propias limitaciones y las traerán a la superficie de la conciencia consciente a fin de que puedas experimentar aquello que necesita ser sanado. Por experiencia, vas a tomar una nueva decisión por ti misma si estás lista.
Cuando te ves al espejo e identificas cómo te hacen sentir al principio, ve profundamente a tus sentimientos. Las personas personificando los espejos no tienen la intención de irritarte realmente; están siendo simplemente quienes ellas son. Cuando tú decidas que ya no quieres creer este entendimiento acerca de estar separada de ti misma, que ya no te quieres sentir más de la manera que te has sentido, entonces empiezas a cambiar esa falsa identidad. Comienzas a percibir tu propio valer y reconoces que vales mucho más de lo que los espejos te han presentado. Y con una profunda emoción, con una profunda aceptación, eliges verdaderamente una nueva identidad tuya. Ocurrirá n milagro muy interesante.
La siguiente vez que estés en presencia de esa persona, no habrá esa energía; se habrá ido completamente porque has resuelto el asunto dentro de ti. Ahora bien, otra manera con la que puedes resolver algo cuando te veas frente a un espejo es el preguntarte: ¿de qué manera soy así también? Muéstrate dispuesta a experimentar los espejos dentro de ti misma que te irritan verdaderamente, de acuerdo a tu propia individualidad. Digamos por ejemplo que eres testigo de alguien robando algo, un ladrón. Esto te irrita verdaderamente, y te empiezas a preguntar: ¿cómo soy yo eso también verdaderamente?
Tal vez no seas un ladrón y simplemente no te puedas relacionar con lo que te está sucediendo, y sin embargo la irritación está allí. Quizá de alguna manera te has robado algo de ti misma de una manera muy sutil. El ladrón es simplemente un disparador. No siempre es exacto, pero siempre se relacionará con uno mismo. ¿De qué manera me he hecho esto a mí mismo también?
Aurelia - Tengo un muy real temor alrededor de este asunto, y es éste: si me tengo que reconciliar y considerarme a "mí misma" como la gente que ha tratado de estropear mi misión o simplemente trato de controlarme, y tú sabrás bien quiénes son algunos de ellos, siento que van a tratar de regresar a mi vida de nuevo para irritarme y estropearme las cosas de nuevo. Mi vida ahora es tranquila y no deseo tener que encararlas de nuevo.
Sananda - ¿Me oíste decir que te reconcilies con ellas?
Aurelia - No.
Sananda - Como te dije antes, no se trata acerca de ellas sino de ti y tu relación contigo misma. Sólo puedes hacer el trabajo interior dentro de ti misma y reconciliarte contigo misma. Rara vez puedes reconciliarte con otra persona en el juego del espejo, especialmente porque vas a encontrar que ellas probablemente perciben todo de manera muy diferente a como lo haces tú. Sólo puedes sanarte a ti misma, y ellas solamente se pueden sanar a sí mismas. Ellas no son tu responsabilidad.
No importa realmente si ves a esa gente de nuevo o no. No se trata de acercarse a ellas y sanar todo con ellas porque este deseo pudiera ser también una proyección. Si ellas quieren sanarse a sí mismas, pueden hacer el trabajo ellas mismas. Eso es cosa suya de cualquier modo. Tu responsabilidad es el sanarte a ti misma y avanzar a una vibración en la Unidad.
Aurelia - De acuerdo, ésa es la clave que me faltaba, y ahora lo entiendo.
Sananda - Sí, dije que cuando cambias y sanas el sentimiento dentro de ti, la siguiente vez que te encuentres con el individuo no se disparará ninguna reacción energética con ese individuo. Esto no significa que vas a reconciliarte con él y que te engancharás con sus energías de nuevo.
Aurelia - En ocasiones uno tiene que trabajar con esos individuos y encararlos en su vida diaria, o pudieran vivir en tu casa o cerca, en el vecindario.
Sananda - No, nunca se trata de ellos, se trata de ti; ellos son simplemente el disparador en el espejo. Y si tú rechazas el espejo, Dios te mandará otro muy pronto, uno mucho más grande. No porque Adama ha hecho esta sugerencia, sino porque ahora mismo es el tiempo apropiado en tu evolución. Si eliges no seguir con esto hasta el final, los espejos tal vez se vuelvan más grandes y desagradables. No porque Adama te va a poner en aprietos ni nada por el estilo, sino porque es la voluntad de tu propia Esencia Divina para ti en este tiempo.
Aurelia - La razón por la que te estoy preguntando es porque deseo llegar al fondo de lo que Adama me ha asignado. Quiero realizar un concienzudo trabajo y entenderlo más.
Sananda - Y vas a encontrar que va a resultar algo increíblemente gozoso y muy facultador. Ahora bien, hay ocasiones en las que pudieras en realidad interactuar con una persona que era un disparador para ti, pero hazlo solamente cuando hayas sanado plenamente. Si te le acercas antes de eso, podría ser desastroso. Hay ocasiones cuando desees tal vez acercarte a otra persona, especialmente si hay sentimientos heridos de por medio. Pudieras disculparte por algo. No estoy diciendo que debas hacerlo, pero tu corazón sabrá lo que deseas hacer. Siempre tendrás un sentimiento y un sentido de lo que es correcto, de lo que está alineado y es apropiado.
En su mayor parte, estas experiencias del espejo son únicamente para ti, para tu relación con tu yo. Cada vez que encuentres una experiencia no alineada o irritante y tú la traes a un estado de una mayor iluminación contigo misma, te traes a ti misma cada vez más cerca de la Unidad. Empiezas a sentir la Unidad con todas las cosas. Ya no te tomas tus experiencias de vida o tus encuentros tan personalmente.
Te das cuenta de que tú has creado esa experiencia, y serás capaz de admitirlo con facilidad. Cuando te encaras a un espejo muy extraño o retador en la forma de una persona en tu vida, serás capaz de admitirlo en seguida y decir: "yo he creado eso, he atraído esa experiencia hacia mí. Sé que yo hice esto, y es una importante sanación para mí, y me la doy a mí misma ahora."
Así que esto se trata de restaurar tu dignidad, de encontrar tus más profundas verdades, de facultarse más y despejarte. Vas a encontrar que cuando lo hayas hecho, no atraerás más esos espejos. Los espejos que obtengas serán bastante diferentes, van a reflejar tu estado sanado. Los espejos no sólo son negativos, ¿sabes?, ellos representan el espectro total, al igual que lo hacen todas las cosas.
Aurelia - Esto me ayuda muchísimo; has dicho esto muchas veces antes, pero ahora lo estoy comprendiendo mucho más claramente. Gracias, Sananda.
Sananda - De nada, querida, y Adama te ayudará. Esta es una profunda elección y sugerencia la que él ha hecho para tu avance, y él te ayudará a través del proceso entero.
Cuando puedas ver simplemente todo a tu alrededor en el mundo y declarar y sentirte en tu interior que eres también todo esto, entonces sabrás lo que es ser Dios. Cuando te encuentres con tu Creador, esto es exactamente lo que te va a decir: "Yo Soy tú y tú eres Yo; somos el mismo. Todo lo que has hecho, Yo lo He hecho también porque lo He hecho contigo. Somos uno y el mismo."
Admitiendo, querida, es el mayor poder de todos. El admitir estar en igualdad con el Yo traerá milagros sobre milagros en tu vida.
Aurelia - Lo haré concienzudamente.
Sananda - Así sea. Estarás muy feliz para siempre de haberlo hecho. Este es otro protocolo de la quinta dimensión por el que todos tendrán que pasar y pasarán por el mismo proceso de iniciación al que te estás encarando ahora a fin de entrar a la Unidad.
Aurelia - Muchísimas gracias. Estoy muy agradecida por tu asistencia en este tiempo.
Sananda - De nada, querida.
Esta conversación entre la autora Aurelia y Sananda es del libro: (Telos, Volumen 3 - Protocolos de la Quinta Dimensión)
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