AA. CHAMUEL, POR JULIE MILLER

Queridos niños, es un placer estar hablando a través de esta niña nuevamente con todos ustedes.

Están pasando a través de muchas dificultades y algunos de ustedes están experimentando muchos retos ahora mismo, y tal vez piensen: “¿qué es lo que he hecho?” Simplemente nada, pero ustedes tomaron una elección. Y si hubieran elegido de manera diferente en esos momentos cuando se hizo la elección, sus retos a consecuencia de esa otra elección hubieran sido diferentes. Me gustaría ayudarlos a llegar a aceptar esos difíciles retos y a aprender las lecciones que se encuentran envueltas en ellos.

Yo he visto a la persona más paciente y gentil convertirse en una que juzga extremadamente y se vuelve hacia una actitud más negativa durante dichos traumáticos tiempos. Para algunos de ustedes esto es bastante normal, pero es también muy exhaustivo para sus energías y también para las energías de quienes se encuentran a su alrededor.

Durante estas lecciones de la vida que están frente a ustedes, o si están despejando experiencias pasadas negativas que los disgustan, por favor tómense un tiempo para sí mismos. Ámense a sí mismos. Muestren compasión y misericordia para consigo mismos, queridos míos, durante estos tiempos. El practicar esto con más frecuencia durante dichos momentos los ayudaría a estar más calmados cuando tratan con otros.

Las penurias y dificultades que han experimentado son para ayudarlos a entender cómo resolverlas y a entender dónde yace un problema y por qué sucedió. Ustedes ganan en perspeciva y sabiduría, queridos míos. Los desaliento a todos ustedes que han hecho esto de culparse a sí mismos.

Ustedes no son los culpables de ninguna relación deteriorada, sin importar si es una relación romántica o platónica. Como ustedes saben, las relaciones requieren más de una persona. El rompimiento de la misma es una combinación de cosas que la han deteriorado. Y aunque ambos o todos los partidos involucrados pudieran haber declarado al comienzo un tipo de unidad para siempre, no siempre resulta de esa manera.

Ellos no están mintiendo, queridos míos, en esos momentos eso era exactamente lo que estaban deseando. Pero con el paso del tiempo las personalidades cambian y la dinámica cambia, y los rasgos o características que los unieron han cambiado. Ellas (las relaciones) son lecciones queridos míos.

Ustedes llegan un poco más lejos a medida en que avanzan. Cada persona que entra en su vida, queridos niños, lo hace por alguna razón, y no todas van a permancer en su vida. Ellas vienen con lecciones, queridos míos, y una vez que la lección ha sido dada, entonces ellos prosiguen adelante. Sé que muchos de ustedes han notado esto.

Abrazen las lecciones, queridos míos. Agradezcan la lección por lo que ella representa. Eliminen los aspectos negativos y vean los positivos. Los aspectos positivos es lo que ustedes están extrayendo de esa relación, queridos míos. Abran su corazón y agradezcan a la persona que se ha ido, ofreciéndole su amor incondicional.

Viviendo a través de su corazón los ayudará a vivir una vida más armoniosa, aún durante los iempos de dificultades. Cuando viven a través de su corazón, queridos niños, ustedes no sólo se están amando a sí mismos completamente, están amando a todos los que están en su vida, incluyendo a quienes no resuenan con ustedes. Acepten a la gente con la que no resuenan, queridos míos.

Ellos tienen un propósito en su vida, y ese propósito no es causarles miserias como muchos de ustedes piensan. Ellos están allí para recordarles quiénes son ustedes. Están allí para alentar sus afirmaciones de YO SOY, para recordarles de creer en ustedes mismos. Ellos tratarán de sacudir esa creencia, ése es su propósito.

Cuando se vean confrontados por tales individuos y encuentran difícil permanecer firmes y fieles a la persona que ustedes se han convertido, por favor llámenme para que los ayude. Les daré la fortaleza adicional que necesitan para avanzar más allá de la difícil situación. Yo sé, queridos míos, que todo lo que necesitan para conquistar las difficultades a las que se enfrentan se encuentra en su interior. No teman su propia fortaleza, acéptenla y úsenla.

Me gustaría regresar a comentar un poco más sobre la importancia de despejar viejos patrones y expectaciones. Con todos los cambios venideros, queridos míos, ustedes están agobiados por los viejos patrones, viejas formas de pensar, atrapados en eventos pasados, o están siendo atraídos a un drama que es negativo y que no los incluye verdaderamente.

Los aliento a que todos ustedes, si es que no lo han hecho ya, miren los eventos del pasado que los han detenido. Sepárenlos todos parte por parte, si tienen que hacerlo. Aprendan las lecciones del pasado, queridos míos, y luego aléjense de él. Acepten las lecciones que han aprendido, queridos míos, y dejen ir aquello que los ha retenido a un evento o circunstancia en particular.

Luego prosigan adelante, queridos míos. Una vez los dejen ir, han terminado con ellos. Si se sintieran jalados de nuevo al mismo evento o circunstancia, entonces podrían haber omitido o no se habían percatado de algo y necesitan revisarlo. Les advierto, queridos míos, no se queden en el pasado pues deben vivir en el presente y prepararse para los mañanas venideros. Aprendan a distanciarse una vez hayan aceptado y liberado un área de su pasado.

Durante estos difíciles momentos, los aliento a que mediten tan frecuentemente como puedan. Sé que para algunos de ustedes esto es increíblemente difícil. Inclusive cinco minutos al día, traten de vaciar su mente de todo pensamiento, permanezcan en silencio. Toma práctica, queridos míos, y el desear hacer esto.

La meditación les ayudará a traer gran calma a su vida. Practiquen técnicas de respiración profunda con sus ojos cerrados donde su único enfoque es la respiración. Aprendan maneras efectivas para ustedes, queridos míos, que los ayuden a permanecer centrados y equilibrados.

Cada día es una nueva oportunidad para crecer y volverse más de su yo Luz, queridos míos. No la eviten, aprovéchenla con vigor y con amor. Empiezen su día con una sonrisa en su cara, ríanse sin reservas, y encuentren el gozo en las cosas simples, queridos míos.

Y así es…Arcángel Chamuel

Canalizadora: Julie Miller